Las galletas de mantequilla son un clásico atemporal. Su textura suave y desmenuzable, junto con su rico sabor a mantequilla, las hacen irresistibles. Son ideales para acompañar un té, un café o simplemente para disfrutar como un capricho casero.
Ingredientes (para unas 20-25 galletas)
- 250 g de mantequilla sin sal, a temperatura ambiente
- 150 g de azúcar glas (puedes usar azúcar normal, pero el glas da mejor textura)
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 300 g de harina de trigo
- 1 pizca de sal
Opcionales:
- 1 cucharada de ralladura de limón o naranja (para un toque cítrico)
- 50 g de almendras molidas (para una textura más rica)
- Chocolate para decorar o bañar las galletas.
Preparación
1. Precalentar el horno:
Precalienta el horno a 180 °C (350 °F) y cubre una bandeja para hornear con papel pergamino o una lámina de silicona.
2. Batir la mantequilla y el azúcar:
- En un bol grande, bate la mantequilla con el azúcar glas hasta que la mezcla esté cremosa, ligera y homogénea. Este paso es clave para la textura de las galletas.
- Añade el extracto de vainilla y, si lo usas, la ralladura de limón o naranja. Mezcla bien.
3. Incorporar la harina:
- Tamiza la harina junto con la pizca de sal e incorpórala poco a poco a la mezcla de mantequilla.
- Mezcla con una espátula o las manos hasta formar una masa suave. Si está demasiado pegajosa, refrigérala durante 15-20 minutos.
4. Formar las galletas:
- Puedes dividir la masa y usar moldes para darles formas divertidas, o simplemente hacer bolitas pequeñas y aplastarlas ligeramente con las manos o un tenedor para un diseño rústico.
- Coloca las galletas en la bandeja dejando un poco de espacio entre ellas.
5. Hornear:
Hornea durante 12-15 minutos, o hasta que los bordes estén ligeramente dorados. No te preocupes si parecen blandas al salir; se endurecerán al enfriarse.
6. Dejar enfriar:
Deja enfriar las galletas en la bandeja durante 5 minutos y luego transfiérelas a una rejilla para que se enfríen completamente.
Opcional (decoración):
- Si quieres, puedes derretir chocolate y bañar la mitad de las galletas o dibujar líneas decorativas con una manga pastelera.
- También puedes espolvorear un poco de azúcar glas sobre las galletas ya frías.
Consejos para unas Galletas de Mantequilla Perfectas
- Mantequilla de calidad: La mantequilla es la protagonista, así que elige una de buena calidad para un sabor más rico.
- Textura: No trabajes demasiado la masa para evitar que las galletas queden duras.
- Conservación: Guárdalas en un recipiente hermético para que se mantengan frescas y crujientes durante 1-2 semanas.
¡Y listo! Estas galletas de mantequilla son perfectas para cualquier ocasión, desde un momento de relax en casa hasta un regalo casero para alguien especial. ¡Disfrútalas! 😋✨