Los cajones son una parte esencial de cualquier mueble de almacenamiento. Ya sea en una cómoda, un escritorio o un armario, los cajones nos permiten organizar y guardar nuestras pertenencias de manera ordenada y accesible. Pero, ¿qué partes componen un cajón? En este artículo vamos a examinar todas las partes que forman un cajón, desde las más básicas hasta las más complejas.
1. Frente del cajón
El frente del cajón es la parte que vemos cuando el cajón está cerrado. Es la primera parte que se fabrica y se fija al resto del cajón. El frente del cajón puede tener diferentes formas, dependiendo del estilo del mueble y de la función del cajón. Los frentes de cajón pueden ser rectangulares, ovalados, curvos, con forma de media luna o de gota, entre otros.
El frente del cajón también puede tener diferentes acabados y detalles, como molduras, relieves, grabados o tiradores. El tirador es la parte que nos permite abrir el cajón y puede estar integrado en el frente del cajón o ser una pieza separada que se fija al frente.
2. Laterales del cajón
Los laterales del cajón son las paredes que forman los lados del cajón. Están unidos al frente del cajón y al trasero del cajón mediante ensambles, como la cola de milano o las espigas. Los laterales del cajón pueden tener diferentes grosores, dependiendo de la resistencia que se requiera para el uso que se le dará al cajón.
Los laterales del cajón también pueden tener diferentes alturas, dependiendo de la profundidad del cajón. En algunos casos, los laterales del cajón se extienden más allá del frente del cajón para formar los bordes superiores del cajón, creando una especie de marco.
3. Trasero del cajón
El trasero del cajón es la pared que forma la parte posterior del cajón. Está unido a los laterales del cajón mediante ensambles y puede tener la misma altura que los laterales o ser más corto. En algunos casos, el trasero del cajón se extiende más allá de los laterales para formar los bordes inferiores del cajón.
El trasero del cajón es una parte importante para la estabilidad y la resistencia del cajón. Si el trasero es débil o está mal fijado, el cajón puede deformarse o desarmarse con el uso.
4. Fondo del cajón
El fondo del cajón es la pieza que forma la base del cajón. Está unido a los laterales y al trasero del cajón mediante ensambles y puede tener diferentes grosores y materiales, dependiendo del uso que se le dará al cajón.
El fondo del cajón puede ser de madera maciza, contrachapado o aglomerado. En algunos casos, el fondo del cajón puede estar recubierto con láminas de madera fina para darle un acabado más estético.
5. Guías del cajón
Las guías del cajón son las piezas que permiten que el cajón se deslice dentro del mueble. Las guías pueden ser de diferentes tipos y materiales, dependiendo del estilo del mueble y del uso que se le dará al cajón.
Las guías más comunes son las guías de riel, que consisten en dos piezas que se fijan al mueble y al cajón y permiten que el cajón se deslice hacia adelante y hacia atrás. Las guías de riel pueden ser de madera, plástico o metal.
Otro tipo de guías son las guías de bola, que consisten en bolas de metal que se insertan en ranuras en los laterales del cajón y en el mueble. Las guías de bola son más suaves y silenciosas que las guías de riel, pero requieren más espacio para su instalación.
6. Separadores del cajón
Los separadores del cajón son las piezas que dividen el interior del cajón en compartimentos más pequeños. Los separadores pueden ser fijos o móviles y pueden tener diferentes grosores y alturas, dependiendo del tamaño de los objetos que se guardarán en el cajón.
Los separadores pueden estar hechos de madera, metal o plástico y se fijan al fondo y a los laterales del cajón mediante clavos, tornillos o adhesivos.
7. Fijadores del cajón
Los fijadores del cajón son las piezas que mantienen el cajón cerrado cuando no está en uso. Los fijadores pueden ser de diferentes tipos y materiales, dependiendo del estilo del mueble y del uso que se le dará al cajón.
Los fijadores más comunes son los pestillos, que consisten en una pieza que se fija al mueble y una pieza que se fija al cajón y que se enganchan cuando el cajón se cierra. Los pestillos pueden ser de metal o plástico y pueden tener diferentes formas y tamaños.
Otro tipo de fijadores son los imanes, que consisten en dos piezas que se fijan al mueble y al cajón y que se atraen cuando el cajón se cierra. Los imanes son más discretos que los pestillos y requieren menos espacio para su instalación.
En conclusión, los cajones son una parte esencial de cualquier mueble de almacenamiento y tienen diferentes partes que los componen. Desde el frente del cajón hasta los fijadores, cada parte cumple una función importante para la estética y la funcionalidad del cajón. Al conocer todas estas partes, podemos apreciar mejor la artesanía y la ingeniería que hay detrás de cada cajón y valorar la importancia de un buen diseño y una buena construcción para su durabilidad y su uso cotidiano.
