La Santidad o Santo es un término que se utiliza en la Biblia para referirse a la pureza y perfección divina. Muchas personas pueden tener diferentes interpretaciones del significado de la santidad o santo, pero en la Biblia se encuentra una definición clara y precisa. A continuación, se detalla el significado bíblico de la santidad o santo y algunos versículos que lo mencionan.
Significado bíblico de «Santidad o Santo»
Según la Biblia, la santidad o santo es un atributo divino que se refiere a la perfección y pureza de Dios. En el Antiguo Testamento, Dios se revela como el Santo de Israel, y en el Nuevo Testamento, Jesús es llamado el Santo de Dios. La santidad es un aspecto fundamental de la naturaleza de Dios y es inseparable de su justicia, amor y misericordia.
La santidad no solo se refiere a la naturaleza de Dios, sino también a su obra. Dios es santo en todo lo que hace, y todo lo que hace es santo. La santidad de Dios se manifiesta en su creación, en su ley y en su salvación. La santidad es un aspecto fundamental de la relación de Dios con su pueblo, y es la base de la adoración y el servicio a Dios.
Versículos bíblicos con la palabra «Santidad o Santo»
- Levítico 19:2: «Habla a toda la congregación de los hijos de Israel, y diles: Santos seréis, porque yo Jehová vuestro Dios soy santo.»
- 1 Pedro 1:16: «Porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo.»
- Isaías 6:3: «Y el uno al otro daba voces, diciendo: Santo, santo, santo, Jehová de los ejércitos; toda la tierra está llena de su gloria.»
- Apocalipsis 4:8: «Y los cuatro seres vivientes tenían cada uno seis alas, y alrededor y por dentro estaban llenos de ojos; y no cesaban día y noche de decir: Santo, santo, santo es el Señor Dios Todopoderoso, el que era, el que es, y el que ha de venir.»
- Salmos 99:3: «Alaben ellos tu nombre grande y temible; El es santo.»
Conclusión
En conclusión, la santidad o santo es un aspecto fundamental de la naturaleza y obra de Dios. La santidad se refiere a la perfección y pureza divina, y es inseparable de su justicia, amor y misericordia. La santidad de Dios se manifiesta en su creación, en su ley y en su salvación, y es la base de la relación de Dios con su pueblo. La Biblia nos llama a ser santos, porque Dios es santo, y la santidad es un requisito indispensable para la adoración y el servicio a Dios.
Es importante tener en cuenta que la santidad no es un atributo que podamos alcanzar por nuestros propios medios, sino que es un regalo que Dios nos ofrece a través de su gracia. La santidad es una obra de Dios en nosotros, y solo podemos ser santos a través de la fe en Jesucristo y el poder del Espíritu Santo. Que la santidad de Dios nos inspire a buscar cada día una vida más cercana a él, y que su gracia nos transforme en personas santas y llenas de su amor y misericordia.