La Biblia está llena de términos y conceptos que pueden resultar confusos para los lectores modernos. Uno de estos términos es «santificar» o «santificación». En este artículo, exploraremos lo que significa este término en el contexto bíblico y cómo se aplica a nuestras vidas.
Antes de profundizar en el significado de la santificación en la Biblia, es importante entender lo que significa la palabra «santo». La palabra «santo» se refiere a algo o alguien que es apartado o consagrado para un propósito divino. En la Biblia, Dios es descrito como santo y aquellos que lo siguen son llamados a ser santos también. La santificación, entonces, es el proceso por el cual Dios nos hace santos.
Significado bíblico de «Santificar o Santificación»
La santificación es un proceso continuo por el cual Dios nos transforma a su imagen. Es un proceso de purificación y separación del pecado, que nos lleva a una vida de obediencia y santidad. En Romanos 6:22-23, Pablo escribe: «Pero ahora, liberados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna. Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro». Aquí, vemos que la santificación es un fruto de la liberación del pecado y es un medio para alcanzar la vida eterna.
La santificación es un proceso que comienza en el momento en que aceptamos a Cristo como nuestro salvador y continúa a lo largo de nuestras vidas. En 1 Tesalonicenses 4:3, Pablo escribe: «Pues la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de fornicación». Aquí, vemos que la santificación es la voluntad de Dios para nuestras vidas y que debemos esforzarnos por apartarnos del pecado para alcanzarla.
La santificación también implica una transformación de nuestro corazón y mente. En Romanos 12:2, Pablo escribe: «No os conforméis a este mundo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta». Aquí, vemos que la santificación no es solo un cambio externo, sino un cambio interno que nos lleva a vivir en la voluntad de Dios.
Versículos bíblicos con la palabra «Santificar o Santificación»
- Levítico 20:7-8 – «Por tanto, santificaos y sed santos, porque yo soy Jehová vuestro Dios. Guardad mis estatutos y ponedlos por obra. Yo soy Jehová que os santifico».
- 1 Corintios 6:11 – «Y esto erais algunos; mas ya habéis sido lavados, ya habéis sido santificados, ya habéis sido justificados en el nombre del Señor Jesús, y por el Espíritu de nuestro Dios».
- 1 Tesalonicenses 5:23 – «Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo».
- Hebreos 12:14 – «Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor».
Conclusión
En conclusión, la santificación es un proceso continuo por el cual Dios nos transforma a su imagen. Es un proceso de purificación y separación del pecado, que nos lleva a una vida de obediencia y santidad. La santificación comienza en el momento en que aceptamos a Cristo como nuestro salvador y continúa a lo largo de nuestras vidas. Es un proceso interno y externo que nos lleva a vivir en la voluntad de Dios.
En última instancia, la santificación es un regalo de Dios para nosotros. Es su deseo que seamos santos y que vivamos una vida que honre su nombre. A medida que nos esforzamos por vivir en la santificación, podemos confiar en que Dios nos guiará y nos transformará a su imagen.
