La Biblia es el libro sagrado de los cristianos y judíos, y contiene una gran cantidad de historias y enseñanzas. Una de las palabras que se mencionan en la Biblia es «Eben Ezer» o «Eben-Ezer», que tiene un significado muy importante para los creyentes. En este artículo, exploraremos el significado bíblico de «Eben Ezer», los versículos de la Biblia que lo mencionan, y lo que podemos aprender de esta palabra.
Significado bíblico de «Eben Ezer o Eben-Ezer»
La palabra «Eben Ezer» se traduce literalmente como «piedra de ayuda», y se refiere a un lugar mencionado en el Antiguo Testamento de la Biblia. Según la historia, los filisteos habían atacado a los israelitas, y el líder de los israelitas, Samuel, decidió pedir la ayuda de Dios. Samuel ofreció un sacrificio a Dios y pidió su ayuda en la batalla contra los filisteos.
Después, Samuel tomó una piedra y la colocó entre Mizpa y Sen, y la llamó «Eben Ezer», diciendo: «Hasta aquí nos ayudó el Señor» (1 Samuel 7:12). Esta piedra se convirtió en un símbolo de la ayuda que Dios había proporcionado a los israelitas en su lucha contra los filisteos. La palabra «Eben Ezer» se utiliza en la Biblia para representar la ayuda y la protección de Dios en momentos de necesidad.
Versículos bíblicos con la palabra «Eben Ezer o Eben-Ezer»
- 1 Samuel 4:1 – «Y la palabra de Samuel vino a todo Israel. Y salió Israel a la guerra contra los filisteos, y acamparon junto a Eben-ezer, y los filisteos acamparon en Afec».
- 1 Samuel 5:1 – «Y los filisteos tomaron el arca de Dios, y la llevaron de Eben-ezer a Asdod».
- 1 Samuel 7:12 – «Entonces Samuel tomó una piedra, y la puso entre Mizpa y Sen, y la llamó Eben-ezer, diciendo: Hasta aquí nos ayudó Jehová».
- 1 Samuel 14:2 – «Y Saúl estaba en el extremo de Gabaa, debajo de un granado que estaba en Migrón; y el pueblo que estaba con él era como seiscientos hombres; y Ahías hijo de Ahitob, hermano de Icabod hijo de Finees, hijo de Eli sacerdote de Jehová en Silo, llevaba el efod; y el pueblo no sabía que Jonatán se había ido. Y entre los pasos por donde Jonatán procuraba pasar para pasar a la guarnición de los filisteos, había una peñasca partida de un lado y de otro; el uno se llamaba Boses, y el otro Sene. El uno estaba al norte, hacia Micmas, y el otro al sur, hacia Gabaa. Y dijo Jonatán a su paje de armas: Ven, pasemos a la guarnición de estos incircuncisos; quizá haga algo Jehová por nosotros, pues no es difícil para Jehová salvar con muchos o con pocos. Y su paje de armas le respondió: Haz todo lo que está en tu corazón; ve allí adonde quieras ir, pues aquí estoy contigo. Y Jonatán dijo: He aquí nosotros pasaremos a esos hombres, y nos dejaremos ver de ellos. Si nos dijeren así: Esperad hasta que lleguemos a vosotros, entonces nos estaremos en nuestro lugar, y no subiremos a ellos. Mas si dijeren así: Venid a nosotros, entonces subiremos, porque Jehová los ha entregado en nuestras manos; y esto nos será por señal. Y se dejaron ver de los de la guarnición de los filisteos, los cuales dijeron: He aquí los hebreos salen de las cavernas en que se habían escondido. Y los hombres de la guarnición respondieron a Jonatán y a su paje de armas, y dijeron: Subid a nosotros, y os haremos saber una cosa. Y Jonatán dijo a su paje de armas: Sube tras de mí, porque Jehová los ha entregado en mano de Israel. Y subió Jonatán trepando con sus manos y sus pies, y tras él su paje de armas; y cayeron delante de Jonatán, y tras él su paje de armas mataba. Y fue aquella primera matanza que hizo Jonatán y su paje de armas, como veinte hombres, en un espacio como de media yugada de tierra, que se ara de bueyes. Y hubo temblor en el campamento, en el campo, y entre todo el pueblo; y la guarnición y los saqueadores también temblaron; y la tierra se estremeció, y fue un temblor muy grande. Y los centinelas de Saúl en Gabaa de Benjamín miraron, y he aquí la multitud se deshacía y corría de aquí para allá. Y dijo Saúl al pueblo que estaba con él: Pasad ahora revista, y ved quién se ha ido de entre nosotros. Y pasaron revista, y he aquí que no estaba allí Jonatán ni su paje de armas. Y Saúl dijo a Ahías: Acerca acá el arca de Dios; porque el arca de Dios estaba entonces con los hijos de Israel. Y aconteció que entre tanto que Saúl hablaba al sacerdote, aquel alboroto que había en el campamento de los filisteos iba en aumento, y dijo Saúl al sacerdote: Retira tu mano. Y Saúl y todo el pueblo que estaba con él se juntaron y vinieron hasta la batalla; y he aquí la espada de cada uno se volvía contra su compañero, y hubo muy grande confusión».
- 1 Samuel 17:1 – «Los filisteos juntaron sus ejércitos para la guerra, y se reunieron en Soco, que es de Judá, y acamparon entre Soco y Azeca, en Efes-damim. Y Saúl y los hombres de Israel se juntaron y acamparon en el valle de Ela, y se pusieron en orden de batalla contra los filisteos. Y los filisteos estaban sobre un monte a un lado, e Israel estaba sobre otro monte al otro lado; y el valle estaba entre ellos. Y salió del campamento de los filisteos un paladín llamado Goliat, de Gat, cuya altura era de seis codos y un palmo. Y tenía un casco de bronce en su cabeza, y llevaba una cota de malla; y era el peso de la cota cinco mil siclos de bronce. Y tenía grebas de bronce en sus piernas, y una jabalina de bronce entre sus hombros. Y el astil de su lanza era como un rodillo de telar, y tenía la punta de su lanza de seiscientos siclos de hierro; e iba su escudero delante de él. Y se paró y clamó a los escuadrones de Israel, diciéndoles: ¿Para qué os habéis puesto en orden de batalla? ¿No soy yo filisteo, y vosotros siervos de Saúl? Escoged de vosotros un hombre que venga contra mí. Si él pudiere pelear conmigo, y me venciere, nosotros seremos vuestros siervos; y si yo pudiere más que él, y lo venciere, vosotros seréis nuestros siervos y nos serviréis. Y el filisteo dijo: Hoy he desafiado al campamento de Israel; dadme un hombre que pelee conmigo. Y cuando Saúl y todo Israel oyeron aquellas palabras del filisteo, se turbaron y tuvieron gran miedo».
Conclusión
La palabra «Eben Ezer» es un recordatorio de la ayuda y la protección de Dios en momentos de necesidad. En la Biblia, se utiliza para representar la ayuda que Dios proporcionó a los israelitas en su lucha contra los filisteos. Los versículos que mencionan la palabra «Eben Ezer» nos recuerdan que podemos confiar en Dios en todo momento, y que Él siempre está dispuesto a ayudarnos y protegernos.
En la vida diaria, podemos aplicar el significado de «Eben Ezer» a nuestras propias situaciones. Cuando enfrentamos desafíos y dificultades, podemos recordar que Dios está con nosotros y nos dará la fuerza y la sabiduría que necesitamos para superarlos. También podemos ser una «piedra de ayuda» para los demás, ofreciendo nuestro apoyo y ayuda en momentos de necesidad.
En resumen, «Eben Ezer» es una palabra que tiene un gran significado en la Biblia y en la vida de los creyentes. Nos recuerda la importancia de confiar en Dios y de ser una fuente de ayuda y apoyo para los demás. Que podamos recordar este significado en nuestras propias vidas y aplicarlo en todo lo que hacemos.
